Un sistema domótico es capaz de recoger información proveniente de unos sensores o entradas, procesarla y emitir órdenes a unos actuadores o salidas. El sistema puede acceder a redes exteriores de comunicación o información.

Cómo funciona la domótica

La domótica incorpora las nuevas tecnologías al equipamiento de viviendas y edificios de forma que el usuario puede controlar de manera centralizada todos los aparatos que conforman la instalación.

Dichos aparatos llevan incorporados sensores que les permiten recabar información y comunicarse con la central domótica a través de una red de comunicación.

El sistema domótico se puede gestionar de forma centralizada a través de un panel de control que permite al usuario la supervisión de su hogar inteligente tanto de manera presencial como de forma remota mediante dispositivos.

La red de control del sistema domótico se integra con la red de energía eléctrica y se coordina con el resto de redes con las que tenga relación: telefonía, televisión, y tecnologías de la información, cumpliendo con las reglas de instalación aplicables a cada una de ellas. Las distintas redes coexisten en la instalación de una vivienda o edificio. La instalación interior eléctrica y la red de control del sistema domótico están reguladas por el Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión (REBT). En particular, la red de control del sistema domótico está regulada por la instrucción ITC-BT-51 Instalaciones de sistemas de automatización, gestión técnica de la energía y seguridad para viviendas y edificios.

Aplicaciones de la domótica

Las distintas aplicaciones de la domótica tienen como fin la mejora de la calidad de vida de los usuarios y se pueden agrupar en diferentes categorías:

Eficiencia energética: el control domótico de una vivienda permite monitorizar y optimizar el consumo energético global mediante una gestión eficiente.

Confort: la posibilidad de controlar diferentes tareas del hogar de forma remota e incluso programarlas de forma automática mediante la central domótica hacen más cómoda la estancia.

Seguridad: los sensores de los distintos objetos conectados al sistema domótico permiten la supervisión del hogar a distancia y la programación de respuestas ante posibles intromisiones en el sistema de seguridad.

Accesibilidad: la domótica busca hacer posible que cualquier persona, independientemente de su grado de capacidad, pueda hacer uso de los elementos del hogar.

Comunicación: es la base de todo sistema domótico, ya que permite la conexión entre el usuario y los diferentes dispositivos conectados y posibilita el control a distancia de la vivienda domótica.